Fallan a favor de un joven
que fue rechazado en el Inpec por bajito
Sentencia
señala que 'estatura no es un factor determinante'. Se ordenó incluirlo entre
aspirantes.
El caso de Miguel Ángel Galvis, quien se inscribió el año pasado en una
convocatoria del Inpec para ocupar el cargo de dragoneante y fue rechazado por
medir menos de un metro con 60 centímetros, fue calificado por el Consejo de
Estado como un acto de discriminación en un fallo de tutela.
"No puede ser la estatura un factor determinante en la idoneidad para
acceder al cargo de Dragoneante en el Inpec", dice la sentencia de la
Sección Segunda del tribunal, que sentó un precedente frente a los límites en
la selección de personal que deben fijar las entidades y empresas.
Y ordenó a la Comisión Nacional del Servicio Civil -entidad responsable del proceso-,
volver a incluir Galvis en los aspirantes.
El Consejo de Estado con esto ratificó un fallo de primera instancia del
Tribunal Administrativo de Santander, que considera que a Galvis se le
vulneraron sus derechos, por ser rechazado pese a que tenía experiencia como
guardia en cárceles y cumplir con todos los requisitos médicos exigidos.
Quienes evaluaron su perfil le notificaron que no era apto "por baja
talla".
El consejo de Estado consideró que las entidades no demostraron la razón por
las que un aspirante con una estatura inferior a 1,66 metros -la talla mínima
exigida por el Inpec en el perfil de la guardia- tenía dificultades
"válida y racionales" para cumplir a cabalidad su trabajo en caso de
haber sido escogido, cuando superó las pruebas establecidas por el concurso
El
tiempo.com
COMENTARIO
Es una
falta de respeto contra esta persona ya que su estatura no es la que va a
realizar las funciones u oficios que se le asignen, se debería medir tal vez
sus capacidades motrices al igual que su
inteligencia para así poder tener una justificación razonable del por qué no es
apto a esta profesión.
"No puede ser la estatura un factor determinante en la idoneidad para acceder al cargo de Dragoneante en el Inpec", dice la sentencia de la Sección Segunda del tribunal, que sentó un precedente frente a los límites en la selección de personal que deben fijar las entidades y empresas.
Y ordenó a la Comisión Nacional del Servicio Civil -entidad responsable del proceso-, volver a incluir Galvis en los aspirantes.
El Consejo de Estado con esto ratificó un fallo de primera instancia del Tribunal Administrativo de Santander, que considera que a Galvis se le vulneraron sus derechos, por ser rechazado pese a que tenía experiencia como guardia en cárceles y cumplir con todos los requisitos médicos exigidos.
Quienes evaluaron su perfil le notificaron que no era apto "por baja talla".
El consejo de Estado consideró que las entidades no demostraron la razón por las que un aspirante con una estatura inferior a 1,66 metros -la talla mínima exigida por el Inpec en el perfil de la guardia- tenía dificultades "válida y racionales" para cumplir a cabalidad su trabajo en caso de haber sido escogido, cuando superó las pruebas establecidas por el concurso
La gente "bajita" ha sido siempre victima de discriminación sin ningún sentido, debemos cambiar esos paradigmas y pensar que todos tenemos las mismas capacidades.
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ResponderEliminarGeneralmente vivimos en una sociedad donde reina todo tipo de discriminación, habitamos un mundo que valora al ser humano por sus cualidades externas, independientemente de sus valores y su ética, a partir de allí seguiremos constituyendo un país lejano al desarrollo, la evolución y el progreso. La solución de mantener y lograr una comunidad equitativa está en nuestras manos.
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